LA VACA DE LECHE Y EL MERCADO

Con la entrada de España en el Mercado Común Europeo, cambiaron muchas cosas para los españoles y todas ellas cambiaron para bien. El mercado de ganados y de manera especial el de las vacas de leche fue uno de los que mas acuso este cambio. Hasta esa fecha estaba en manos de “tratantes” que desde mercados como el de Tórrelvega (Santander) Talavera de la Reina (Toledo) o el de Ávila repartían vacas de leche por todo el territorio nacional. Bien, pues todo este trasiego de ganado cambio de manera total con la entrada de España en la Unión Europea, hasta el punto de que hoy estos mercados han desaparecido totalmente. Gracias a este cambio se ha podido mejorar la sanidad de nuestros animales que al estar mas controlados, no transmiten enfermedades como antes especialmente Brucelosis y Tuberculosis ya que hoy casi han desaparecido de nuestras ganaderías. Los ganaderos hoy tienen explotaciones mas grandes y modernas, con lo cual producen mas leche y de mucha mas calidad, siendo muchos menos en numero. Hoy o bien se importa ganado de fuera para abastecer las necesidades del mercado y de nuestras granjas, o de lo contrario se compran entre los mismos ganaderos, ya que existen ganaderos a los cuales les sobran novillas para reponer las bajas de sus granjas. Con la Cuota de producción impuesta por el Ministerio que como es sabido es obligado cumplir, el mercado se ha quedad entre los mismos ganaderos que saben que compran el ganado procedente de granjas saneadas, además de muy buena calidad. Uno no puede menos de poner la vista atrás y recordar aquellas vacas de los mercados en los que se podían ver vacas muy mal formadas morfológicamente y compararlas con las que podemos ver en nuestras explotaciones ganaderas de hoy, que pueden competir sin ningún complejo con las mejores de Europa. De la misma manera ha mejorado nuestras instalaciones ganaderas y el manejo de nuestro ganado, tan importante para conseguir el máximo rendimiento y producción, así como la alimentación que en nada se parece al la que daban nuestros antepasados